AYOTZINAPA, Guerrero.- La Oficina en México del Alto Comisionado de las Naciones Humanos para los Derechos Humanos en México (ONU-DH) acudió el día de hoy a la Escuela Normal Rural, “Raúl Isidro Burgos”, de Ayotzinapa, para reunirse con familiares y compañeros de los estudiantes desaparecidos, ejecutados y heridos los días 26 y 27 de septiembre en Iguala, Guerrero. La visita es parte del seguimiento al caso que viene dando la ONU-DH y reitera la solidaridad y la condena enérgica frente a los trágicos hechos de Iguala.
Para la ONU-DH el encuentro es un mensaje de respaldo inequívoco a las propias víctimas, sus familias y seres queridos, a su causa y a la plena legitimidad de sus demandas de justicia, y para reiterar la disposición de la ONU-DH a seguir acompañándolas en su búsqueda de justicia.
“Hay en nosotros una honda admiración por los familiares y estudiantes por cómo se han sobrepuesto a la adversidad, expuesto su dolor con dignidad y exigido a las autoridades el cumplimiento de sus obligaciones” expresó Javier Hernández Valencia, Representante de la ONU-DH en México. Asimismo, sostuvo que “la indignación que se ha despertado en México y a nivel internacional por los hechos de Iguala tiene un anclaje directo en la fortaleza de las familias y estudiantes que con plena conciencia cívica han exigido de manera enfática el respeto a sus derechos humanos”.
La ONU-DH les alentó a seguir reivindicando sus derechos de manera pacífica y por los cauces democráticos hasta esclarecer el paradero de sus seres queridos y obtener justicia por los trágicos hechos perpetrados, al tiempo que reconoció el trabajo de las organizaciones de derechos humanos que desde el primer momento han acompañado a los familiares y estudiantes y a todas las que se siguen sumando a esta labor.
La ONU-DH recuerda que el derecho de reunión pacífica es esencial en toda sociedad democrática y que el ejercicio, defensa y reivindicación pública de los derechos humanos es crucial para alcanzar su realización efectiva. La detención arbitraria y el uso excesivo de la fuerza contra manifestantes que protestan de manera pacífica vulneran los derechos humanos y socavan el ejercicio de las libertades públicas que debe ser incentivado y protegido por las autoridades.
La ONU-DH seguirá subrayando al Estado mexicano el marco de sus obligaciones internacionales en materia de derechos humanos, la necesidad de su cumplimiento y su indelegable rol en la materialización del derecho a la verdad, la justicia y la reparación de las víctimas que le corresponde frente a toda violación a los derechos humanos.
De igual forma, la Oficina hará todo lo que está a su alcance para que se obtengan garantías de no repetición y para este propósito seguirá impulsado una agenda robusta y efectivamente implementada en materia de derechos humanos en el país en temas tales como el combate a la impunidad, búsqueda efectiva de personas desaparecidas, reparación integral, servicios forenses independientes, protección de víctimas, testigos y denunciantes, registro de personas detenidas y uso legítimo de la fuerza pública. Finalmente, la ONU-DH alienta al Estado mexicano a apoyar a las escuelas normales rurales, reconociendo su loable misión educativa en las comunidades.