En este nuevo escenario, la revista Playboy, icono del erotismo durante más de sesenta años, se ve obligada a hacer un reset para sobrevivir.
En los tiempos de Internet, el sexo ya no es tabú.
Seguirá ofreciendo imágenes de actrices y modelos famosas, por supuesto, presentadas de forma sensual y seductora, por supuesto, pero vestidas.
Y, paradojas de la vida, ese reset consistirá en desandar lo andado: a partir de marzo, ya no exhibirá más mujeres desnudas en sus páginas.
Playboy se convirtió en el símbolo de la revolución sexual de los felices sesenta, pero una revolución destinada exclusivamente a los hombres y con mirada de hombre.
Fuente: http://elpais.com/elpais/2015/10/14/opinion/1444840938_658010.html