La clase política alemana ha reaccionado indignada ante los nuevos episodios de violencia xenófoba.
Las imágenes de un grupo de refugiados (mujeres y niños incluidos) aterrorizados en un autobús ya horrorizaron al país a finales de la semana pasada.
Pero más allá de la condena a la violencia, la crítica se dirige ahora al Gobierno regional y a la policía de Sajonia.
Los verdes acusan a las autoridades de Sajonia de minimizar la violencia extremista y a la policía de haber fracasado estrepitosamente.
“No podemos esperar hasta que haya los primeros muertos”, ha señalado este lunes el ministro de Justicia, el socialdemócrata Heiko Maas.
Fuente: http://elpais.com/internacional/2016/02/22/actualidad/1456155028_551516.html