Y porque le consiente serenar su liderazgo entre los socialistas, vigilando como un gendarme la legislatura de Mariano Rajoy.
Y porque Mariano Rajoy ha obtenido un resultado incontestable.
La noche que iba a acabar con Rajoy y con Sánchez, ha sido la del crepúsculo de Iglesias y de Rivera.
Y la tercera victoria consecutiva de Rajoy le ha dado razones para aferrarse a la Moncloa.
El bipartidismo ha ganado las elecciones, el bipartidismo tiene que resolver el galimatías de la investidura.
Fuente: http://elpais.com/politica/2016/06/26/actualidad/1466975644_973571.html