Por un lado, el empeño, mal defendido por su entorno, de Ter Stegen en jugar la pelota con temeridad fatal.
Pero no fue así: fueron obsequios absurdos de Ter Stegen.
Ter Stegen lleva más en poco tiempo.
En diez años, Valdés regaló dos goles por estas cosas.
Valdés solo regaló dos goles por jugar con los piesEs bueno que el portero maneje bien el pie e inicie la jugada.
Fuente: http://opinion.as.com/opinion/2016/10/04/portada/1475535871_111747.html