Pedro MATÍAS
OAXACA, Oax. (pagina3.mx).- La Juez Octavo de Distrito, Adriana Alejandra Ramos León, concedió la libertad preparatoria al ex presidente municipal y al ex síndico de San Agustín Loxicha, Agustín Luna Valencia y Fortino Enríquez Hernández, sentenciados homicidio calificado y pertenecer al Ejército Popular Revolucionario (EPR).
Después de 20 años, los supuestos integrantes del EPR abandonaron la Penitenciaría del Estado alrededor de las 23:00 horas de este martes 6 se diciembre, aunque deberán de cubrir, cada uno, 111 mil 252 pesos dentro de un lapso de 24 meses, para lo cual deberán exhibir, el día tres de cada mes, la cantidad de 4 mil 630 pesos ininterrumpidamente, como reparación del daño.
Luna Valencia y Enríquez Hernández fueron detenidos el 25 de septiembre de 1996 acusados de participar en el ataque armado que realizó el grupo guerrillero, el 28 de agosto de ese mismo año, a instalaciones policiales y de la Marina en La Crucecita, Huatulco.
El 28 de agosto de 1996, ráfagas de proyectiles sacudieron diversas oficinas gubernamentales lo que marcó la presencia del Ejército Popular Revolucionario (EPR) en la entidad. La irrupción del grupo insurgente abarcó ataques a la base naval, así como a instalaciones militares y de las policías estatal y municipal en Bahías de Huatulco, Tlaxiaco y la capital de Oaxaca, cuyas acciones dejaron un saldo de 16 muertos.
A partir de esos hechos, fueron detenidas cerca 152 personas, en su mayoría indígenas de la región Loxicha, según documentó el Bufete Jurídico Popular.
Luna Valencia fue sentenciado a 31 años de cárcel y el ex síndico Enríquez Hernández a 21 años. Al ex presidente municipal de San Agustín Loxicha le concedieron la libertad anticipada cuando le faltan 9 años para cumplir su sentencia, mientras que al ex síndico municipal salió libre cuando le falta un año para cumplir su sentencia.
Sin embargo, en el Penal de Ixcotel todavía se encuentran Abraham García Ramírez, a 30 años; Álvaro Sebastián Ramírez, 29 años, y Justino Hernández José, a 23 años con 6 meses, mientras que en Etla se encuentra recluido Zacarías Pascual García López, sentenciado a 24 años de cárcel.
La mayoría de los indígenas presos fueron acusados de los delitos de conspiración, terrorismo, homicidio calificado y homicidio en grado de tentativa.
Las “leyes nos mancharon y nos robaron 20 años de mi vida”, dijo entre lágrimas el ex presidente municipal y aunque lo acusaron de ser integrante del EPR, insistió en que nunca fueron parte del grupo insurrecto.
Fortino Enríquez le duele que al estar encarcelado injustamente no pudo enterrar a su madre ni a un hijo, aunque ahora quiere disfrutar de su familia.