Roberto Cruz Lavariega
“Por el lugar donde se encuentran las quinientas toneladas de basura, es un delito de tema federal” comenta la diputada perredista Paola Gutiérrez Galindo, Presidenta de la Comisión de Ecología del Congreso del Estado, de la 63 legislatura estatal, sobre el tiradero de basura a cielo abierto en el cauce seco del Río Atoyac de la Ciudad de que desde hace semanas se habilitó como tiradero municipal, justo atrás de la Central de Abastos.
La legisladora explica en entrevista durante la sesión ordinaria del pasado miércoles que la comisión a su cargo ha determinado que este tiradero traerá para la ciudad y para quienes vivan cerca del lugar no solo una notoria contaminación visual, sino lo más grave, una contaminación del subsuelo, de aire y del agua.
“Las posibilidades de riesgo en materia de salud en la población cercana a los márgenes del Rio Atoyac son muy grandes. Quien debe dar conocimiento del tema es la PROFEPA (Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente). Tenemos que esperar que tipo de responsabilidades debe determinar, o la magnitud de los daños y que sanciones le aplicara al municipio”, agrega.
Comenta que como presidenta de la Comisión de Ecología le pidió al delegado de la PROFEPA en Oaxaca, Nereo García García, que le informe a su comisión y por extensión a la 63 legislatura, de manera puntual cuales son las sanciones que la PROFEPA le va a fincar al municipio de Oaxaca de Juárez y que medidas de saneamiento ambiental está contemplando al respecto.
“Hoy lo presentamos (19 de julio), no te voy a mentir y decir que lo presenté la semana pasada. Hoy se le entregó el oficio al delegado de la PROFEPA. Espero que a más tardar mañana o pasado mañana me informe y me dé respuesta. De no ser así vamos a tener que presentar un exhorto ante el Pleno o presentar la denuncia a la misma PROFEPA en contra del municipio de Oaxaca de Juárez”.
Considera la diputada, al tiempo que hoy versiones periodísticas han dado cuenta de que en la ciudad de Oaxaca ya existen hasta 20 distintos tiraderos clandestinos, todo después de una contingencia ambiental iniciada hace dos semanas por la toma del basurero municipal de la Villa de Zaachila por vecinos de la colonia Vicente Guerrero y otras 30 colonias en la exigencia de su reclamo porque miembros del Frente Popular 14 de julio salieran de sus territorios acusándolos de extorsionarlos, atacarlos y perseguirlos.
Se le comenta a Gutiérrez Galindo que notas de prensa dan cuenta de que la PROFEPA en Oaxaca admitió que según sus investigaciones el tiradero de basura en el Río Atoyac era una situación irregular, pero que estaba justificado que el edil José Antonio Hernández Fraguas lo hubiera habilitado como tal, porque ante las circunstancias no tuvo de otra.
“Eso dijo el presidente municipal”, precisa la perredista. “Yo quiero tener la certeza de que eso fue realmente lo que dijo la PROFEPA, hasta ahorita todavía no la tengo y no puedo basarme solo en los dichos de Fraguas o de los medios de comunicación”.
¿Si el basurero de Zaachila ya está oficialmente abierto, porque seguir usando el cauce del rio Atoyac como basurero?, se le cuestiona.
“Esa es exactamente la información que estoy solicitando, como delito federal que es yo no puedo intervenir de manera directa como presidenta de la Comisión de Ecología”, es su respuesta
Entonces, ¿si lo dicho por el munícipe es real y la PROFEPA ha avalado el basurero en el Atoyac como una especie de delito ecológico justificado, que queda por hacer?
“No existen delitos justificados”, precisa la presidenta de la Comisión Legislativa de Ecología. Agrega que “es deber de la PROFEPA dictaminar que medidas urgentes debe emprender el municipio y emplazarlo a que si no lo hace en un término, lo sancione, para recomponer el daño ambiental que ya hizo”.
¿El Congreso estatal no puede influir para estas quinientas toneladas de basura se vayan del cauce del Río Atoyac?, es la nueva pregunta que se le hace a la legisladora. Quien responde con otro cuestionamiento.
“¿Dime como si están en terreno federal?, y ahora al parecer, la misma PROFEPA lo está permitiendo. Hay un vacío en la Ley General de Equilibrio Ecológico en el estado de Oaxaca que nos detiene. Solo nos queda presionar a la PROFEPA para que sea puntual a la hora de hacer cumplir la ley federal de equilibrio ecológico”.
Gutiérrez comenta que dicha ley no habla de residuos sólidos sino de contaminación directa en territorio federal. Define que “existe un foco de contaminación directa consensuada por las mismas autoridades”.
“Quiero que el delegado de la PROFEPA en Oaxaca realmente me diga si él está consintiendo este delito federal. Si lo está haciendo entonces, él está incurriendo en omisiones y delitos en materia ambiental y entonces lo que vendría seria el hacerle llegar una queja al Procurador Federal de Protección al Ambiente (Francisco Moreno Merino)”.
Comenta la legisladora, refrendando que hoy el daño ecológico a una ciudad que desde hace más dos semanas se ha convertido en un basurero “es grave”.
“Estamos en época de lluvias, la descomposición de manera natural de cualquier basura genera escurrimiento que en materia ambiental se les llaman lixiviados, ácidos que están de manera directa escurriéndose al rio y al subsuelo. Los olores que se generan en los márgenes del Atoyac contaminan el aire. Comida, latas, desechos orgánicos, inorgánicos y de todo tipo cuando se conjugan puede traer una campo de cultivo para microorganismos, y lo que viene después de eso puede ser fatal”.
Gutiérrez Galindo comenta además que está claro que toneladas y toneladas de basura en el cauce un río seco puede redundar en inundaciones graves si las lluvias se intensifican.
Agrega que también está el riesgo de que la contaminación del basurero improvisado alcance a los alimentos que se distribuyen en la Central de Abastos y que son consumidos en los hogares de toda la población oaxaqueña
“No es algo menor todo esto, como lo está marcando el presidente municipal José Antonio Hernández Fraguas. Quizás él lo marca así porque no vive cerca de la Central de Abastos o porque no vive a los márgenes del Rio Atoyac, como el caso de la gente que vive en San Martin Mexicapan”.
La legisladora termina diciendo que el presidente municipal José Antonio Hernández Fraguas parece no vivir en la ciudad que gobierna.
