Jaime GUERRERO
OAXACA (#pagina3.mx).- En medio de la crisis legislativa que priva en la Cámara Baja del Congreso de la Unión, por la elección de la nueva Mesa Directiva-motivada por el pase automático del Procurador General de la República, Raúl Cervantes- el diputado federal del PRD, Sergio López Sánchez, dijo que es preferible una parálisis legislativa en ese poder, que avalar la conversión del titular de la PGR a Fiscal General de la Nación, porque protegerá la corrupción que priva en el Gobierno Federal.
Y es que con 257 votos en favor, 209 en contra y dos abstenciones, el Pleno de la LXIII Legislatura Federal, rechazó la propuesta de los integrantes de la Mesa Directiva y se decretó un receso para que los coordinadores parlamentarios construyan un nuevo acuerdo.
Con esto se rechazó que el priista Jorge Carlos Ramírez Marín sea el próximo presidente de la Cámara. También se bajó a Hilda González, Javier Bolaños, Alejandro Ojeda y María Ávila Serna como vicepresidentes y a Marco Antonio Aguilar, Alejandra Reynoso, Ivanova Pool Pech, Andrés Fernández del Valle, Ernestina Godoy, Verónica Delgadillo, María Eugenia Ocampo y Guadalupe Pera.
Los coordinadores parlamentarios tendrán que construir una nueva propuesta y presentarla al Pleno para una nueva votación antes de que terminará el 5 de septiembre, pues este martes se terminaba el plazo legal para que permanezca la actual Mesa Directiva, encabezada por Guadalupe Murguía.
La mayoría de los legisladores que votaron en contra, lo hicieron como un acto de presión para que el Senado descongele las iniciativas que frenan el pase automático del Procurador, Raúl Cervantes, como Fiscal General.
Por lo pronto, López Sánchez, confirmó que no hay acuerdos, no hay antecedentes del caso y no hay disposición legal que de una salida a la crisis que priva en el Poder Legislativo, por el nombramiento de la Mesa Directiva.
Explicó que no se pudo llevar a cabo el nombramiento de la Mesa Directiva, por la posición que han adoptado el grupo parlamentario del PRD, PAN y MC, hasta que se modifique el transitorio que da el pase automático a Cervantes, como Fiscal de la Nación del Sistema Nacional Anticorrupción, porque generaría impunidad transexenal del actual Presidente de la República, “al ser un fiscal a modo o mejor conocido como carnal”.
En medio de ese impasse, el nombramiento de la Mesa Directiva de ese poder, recayó en el panista, Ernesto Cordero, por acuerdo del PRI, PAN y Morena, sin respetar la decisión mayoritaria de los que integran la fracción parlamentaria panista.
“Desde ahí se origina todo y habla de una pretensión muy clara del PRI de tener un Fiscal a modo para tapar la corrupción que caracteriza al Gobierno de Peña Nieto”, asestó.-
Y es que las posiciones encontradas de los grupos panitas y el rechazo de los parredistas, no permitieron la instalación de la mesa directiva el pasado 1 de septiembre y tienen como plazo éste 5, por ello se convocó al pleno, “pero al no existir la disposición y voluntad por parte del PRI, Presidente de la República, Senadores, para modificar el transitorio, es una razón por la cual se asume una posición inamovible”, asentó.
Vencido el plazo legal, al no llegar a un acuerdo, López Sánchez, refirió que se ha planteado que la actual mesa directiva, encabezada por Murguía, por practica parlamentaria, siga fungiendo en la responsabilidad, al igual que los aún integrantes.
Concedió que no hay una disposición expresa en la ley, en términos de lo que tendría que ocurrir, “pero tampoco hay un vacío en términos de la representatividad porque la propia practica parlamentaria plasma que no puede quedar un vacío y al darse un receso, éste puede durar un día o hasta más, para reanudar la sesión, se alcancen los acuerdos y se pueda llevar a cabo el nombramiento de la mesa”.
Bajo esa perspectiva, López Sánchez, confesó que es preferible el impasse legislativo a avalar un Estado de corrupción que priva en el país, al dar paso al pase automático para Raúl Cervantes, como fiscal de la nación.
Recordó que Peña Nieto, en diciembre, envío una iniciativa para modificar el transitorio, sin embargo, está en la congeladora y le mintió a los mexicanos, porque al exhibirse los grandes escándalos de corrupción de desvíos millonarios por medio de empresas fantasmas, el PRI busca blindarse.
Y al desestimar que la posición obedezca a fines electorales, dijo que es firme la posición de poner un alto a la corrupción, por tanto el fiscal de la nación, no debe tener vínculos con el PRI, porque el actual titular de la PGR, fue abogado de Peña Nieto y tiene militancia priísta.