Bergoglio comió con representantes de diversos grupos indígenas y después visitó y oró ante la tumba de Samuel Ruiz, el Tatic.
Como a monseñor Óscar Romero, en El Salvador, Samuel Ruiz espera, a cinco años de su muerte, una profunda resignificación.
El éxodo como la intervención indignada de Dios en la búsqueda de libertad y de dignidad de los pueblos indígenas.
El Papa se detuvo frente al sepulcro de Ruiz, defensor de los derechos de los indígenas, y colocó un arreglo floral.
Vuestros pueblos han sido incomprendidos y excluidos de la sociedad, dice el Papa a los indígenas de Chiapas.
Fuente: http://www.noticiasnet.mx/portal/cuenca/opinion/328935-perdon-perdon-hermanos-papa-indigenas