El secretario de Hacienda, por su parte, niega apoyo presupuestal para mejorar el transporte público en la capital del país.
Nuevamente el titular del Medio Ambiente federal regresó a su sepulcro burocrático, mientras otra vez tarde Peña Nieto lamenta lo que pasa.
Tarde se informa la clausura por corrupción de verificentros en la ciudad de México.
Y para colmo, mostraron nuevamente su prepotencia al no sacar de la circulación las camionetas que ocupan sus guaruras.
Ni una palabra de por qué no se cumplió con el programa establecido en 2011 en materia ambiental.
Fuente: http://www.jornada.unam.mx/2016/04/11/opinion/018a1pol