La hegemonía en las calles brasileñas pertenece hoy a la derecha, por primera vez en 50 años.
Es una derecha militante, que tiene estrategia y organizaciones propias, laica, politizada, formada en universidades privadas y públicas.
No es la simple reproducción de la vieja derecha católica y militarista que apoyó el golpe de 1964.
A contrapelo, impuso modos de protesta, símbolos y discursos que sentaron su hegemonía hasta el 20 de junio de 2013.
Pero se opone a las cuotas para estudiantes negros en las universidades y cree que Bolsa Familia la perjudica.
Fuente: http://www.jornada.unam.mx/2016/04/01/opinion/019a1pol