“El buen pan emerge y salvará un sector dominado por los fabricantes de panes congelados precocidos y el pan de molde.
Mientras eso sucede, se ha formado un ecosistema de panaderos tradicionales que investigan e intercambian recetas.
Hacemos 500 kilos diarios de pan, somos ocho personas y facturo unos 500.000 euros”, cuenta Marca, dueño de la madrileña Panic.
Un nutrido grupo de jóvenes de profesiones variopintas se han lanzado a hacer pan a la vieja usanza.
En Madrid y en casi toda la zona centro solo había despachos de pan, los obradores quedaron reducidos al arco mediterráneo, Galicia y algunos pueblos.
Fuente: http://elpais.com/economia/2016/07/01/actualidad/1467384676_786489.html