Todos los años, alrededor de 700.000 personas mueren por infecciones causadas por bacterias resistentes a los medicamentos disponibles.
Actualmente, se estima que alrededor de 5,7 millones de personas mueren cada año por infecciones tratables.
La vigilancia de estas poblaciones descuidadas ayudará a controlar mejor las infecciones y a reducir las posibilidades de que aparezcan resistencias.
Esto es una forma de crear resistencias que ha convertido a las explotaciones agropecuarias en un campo ideal de entrenamiento para las superbacterias.
El uso masivo de antibióticos en granjas, la globalización y una falta de interés económico por desarrollar nuevos tratamientos han agravado la situación.
Fuente: http://elpais.com/elpais/2016/09/21/ciencia/1474453759_095416.html