Mas el otro problema es que frente a esas relaciones tan cercanas y solidarias entre los dos grandes partidos neoliberales del país, las izquierdas parecen conmoverse mucho menos.
La alianza entre el PRI y el PAN se ha llevado a cabo en medio de un conflicto por el ejercicio del poder público, pero eso no quiere decir que aquélla sea inexistente.
Sí, todo giro oportunista de las izquierdas políticas y sociales es un elemento a favor de la alianza entre el PRI y el PAN porque significa ceder o acercarse a los puntos programáticos neoliberales.
Las izquierdas políticas y sociales, mientras tanto, parece que no están pensando en reaccionar.
El hecho de que en el transcurso de la aplicación del programa neoliberal se hayan presentado tropiezos no significa que éstos hubieran sido producto de contrariedades entre el PRI y el PAN.
Fuente original: «PRI y PAN, una alianza histórica», artículo de Pablo Gómez – Aristegui Noticias