Concluye la Caravana 2017 en el marco del Día Internacional del Migrante inmersos en noticias negativas y preocupantes acerca del futuro de las políticas migratorias a nivel mundial. La caravana festeja la buena noticia de los 7 encuentros de migrantes desaparecidos con sus familiares donde quedó muy claro que solo el activismo social busca y encuentra migrantes. No tenemos a nadie en quien confiar sino en nosotros mismos y en nuestros aliados. Continuemos organizando y movilizando así como implementando campañas para la realización de nuestras aspiraciones: el respeto y la promoción de nuestros derechos, nuestra reunificación final con nuestras familias en el país de origen y una sociedad sin migración forzada.
Tenosique, Tabasco, a 18 de Diciembre de 2017.- Difícilmente se pudiera dar una mejor conclusión para esta XIII edición de la caravana que la parada en el Albergue para Personas Migrantes La “72”, dirigido por el fraile franciscano Tomas González, donde no solo proporcionan ayuda humanitaria sino que son también un referente de lucha por los derechos humanos de lo migrantes. Para los participantes de la caravana, fue un alegre cierre a un recorrido de cuatro mil kilómetros que trajo lágrimas, risas, abrazos y aprendizajes. Las madres y los padres de la caravana, que vienen del triángulo norte centroamericano – Guatemala, Honduras, El Salvador y también de Nicaragua, se llevan un compromiso renovado para seguir adelante en su búsqueda que ya es una sola hasta encontrar a todos los migrantes desaparecidos en el camino reconocen los graves problemas sociales que llevan a la migración forzada y compartieron una breve resumen de la situación en su país donde relatan que en todos los países, lejos de mejorarse, se han agravado en los últimos años según nos cuentan sus delegadas:
Guatemala: Nuestro país sigue siendo un país expulsor de migrantes debido a la pobreza extrema y las distintas formas de violencia. Como personas migrantes y sus familiares, reivindicamos nuestro derecho a migrar en búsqueda de condiciones de una vida digna y para salvaguardar nuestras vidas. Exigimos no más muros; no más militarización; no más corrupción, criminalización, persecución y desaparición de nuestras familias migrantes.
Honduras: La violencia y la desestabilización de la democracia son los motivos principales por la migración. La violencia física del crimen organizado está vinculada con la violencia económica, lo cual deriva en la migración forzada de miles de nuestras gentes que, en la ruta por México han padecido hambre, sed, frio, y violación de sus derechos humanos. Muchos hondureños huyen para salvar sus vidas, y en México se encuentran en procesos de refugio. Ante esta situación demandamos a los países el trato humano a los solicitantes de en búsqueda de condiciones dignas y seguras para sus familias. Ahora con el conflicto pos-electoral en Honduras, en un contexto de movilizaciones masivas que exigen transparencia y respeto al voto y enfrentan represión, estamos seguros de que la crisis política–si no se resuelve pronto con justicia, confiabilidad y pleno respeto a la ley impulsará una mayor migración de personas.
Nicaragua tradicionalmente ha sido un país expulsor de migrantes, aunque en los últimos años se ha convertido también destino para personas migrantes por tener mayores niveles de seguridad frente a los demás países de la región. Sin embargo, nuestro país enfrenta el mismo problema de paisanos/as migrantes desaparecidos en la ruta migratoria por México.
Exhortamos a las autoridades nicaragüenses y mexicanas a unir esfuerzos entre ellos, y con las familias de los y las desaparecidos, para encontrar a nuestros seres queridos y a la verdad, justicia y paz que tanto necesitamos. Asimismo, exhortamos a la sociedad no ser indiferente frente las necesidades de las personas migrantes y hacer causa común con ellas.
En El Salvador, después de la ola de migración del conflicto armado, las personas siguen saliendo debido a otras formas de violencia que han costado más vidas que el conflicto. La extorsión, las amenazas y los asesinatos son una realidad que obliga a miles huirse del país. Las madres salvadoreñas acompañamos a nuestras hermanas centroamericanas en este camino de búsqueda, para alzar nuestra exigencia de verdad y justicia como expresión del dolor que nos ha marcado. Hemos visto que México no es un lugar seguro para las personas que huyen de la violencia.
Al contrario, se ha vuelto un campo minado para nuestros migrantes—un lugar de asesinatos, desaparición forzada, secuestro, violación sexual, trata y tráfico de personas. Solo en 2010 ocurrieron cerca de 20,000 secuestros de migrantes y se dio a conocer el caso de los 72 migrantes asesinados en San Fernando Tamaulipas y 193 más encontrados en fosas clandestinas en el mismo estado. En la actualidad, el Plan Frontera Sur está causando que muchos migrantes hombres y mujeres, sean víctimas del crimen organizado en complicidad con las autoridades encargadas de la “seguridad”.
Participantes de los cuatro países reconocieron grandes avances con esta XIII caravana de madres, entre ellos, desarrollar mayor conocimiento de la problemática y el entorno mexicano, el empoderamiento de las madres en la lucha, y los propios reencuentros.
Nota completa: https://movimientomigrantemesoamericano.org/2017/12/19/finaliza-la-xiii-caravana-de-madres-centroamericanas-logrando-siete-reencuentros/amp/
