ANTONIO MUNDACA
SANTA CRUZ XOXOCOTLÁN, Oax., (pagina3.mx).- El Centro de la cabecera de esta municipalidad se inunda de rezos y flores en Semana Santa.
El fervor religioso se vuelve una marcha de colores en las calles que rodean el pequeño zócalo.
Poco antes de la medianoche del Jueves Santo, previo a la crucifixión, la imagen del Divino Preso desfila por las calles.
Desde la iglesia las penitencias y oraciones se escuchan por el pueblo. La tradicional procesión de los Cristos en este municipio de Valles Centrales reúne a la comunidad zapoteca.
Vestidos de centuriones y apóstoles, nazarenos guían a las personas con sus cristos de madera hasta el atrio de la iglesia.
Desde ahí marchan en dos filas por las calles con su señor crucificado. La efigie santa de todos los tamaños ha sido bendecida por decenas de años y la cubren de flores.
Marchan y rezan. Mujeres y hombres hacen pequeños silencios en las esquinas para alzar la imagen sagrada y el cuerpo lastimado de su nazareno.