Volver a desaparecer: el buscador que revela la falta de consistencia en los registros de personas desaparecidas

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Data Cívica creó un buscador titulado Volver a desaparecer que ayuda a comprender la cantidad de inconsistencias que existen en los registros oficiales del Gobierno Federal sobre el número de personas desaparecidas en México. 

Deja claro que hay alrededor de 10 mil nombres que aparecían en listas del 2018 y que dejaron de aparecer para la nueva lista del 2024. No se especifica si fueron localizadas ni por qué fueron borradas, ni siquiera la metodología utilizada para crear la base de datos.

En realidad, muchas de las personas que dejaron de aparecer en el registro del 2024 fueron desaparecidas por segunda vez, ahora en papel, y por el mismo Estado mexicano.

Por Ana Paula Carbonell Díaz / @AnaPauCarbonel1

Alicia Franco es analista de datos en Data Cívica desde hace 5 años, donde ha trabajado en proyectos relacionados con la militarización, la democracia y la violencia de género. Fue coordinadora del proyecto Volver a desaparecerElla, junto con su equipo, estuvo encargada de hacer el cruce de información entre las confusas y mal organizadas listas que el Gobierno Federal le provee a la ciudadanía para tener un registro del número de personas desaparecidas en el país. En el proceso, pudieron constatar la existencia de un gran número de inconsistencias.

“Encontramos mucha falta de información. Muchos nombres borrados. Muchos, muchos nombres borrados sin explicación”, afirmó la analista en entrevista con ZonaDocs. 

Timeline de publicaciones del gobierno

Data Cívica revisó e hizo scraping y matching de diversas fuentes de datos publicadas por el Gobierno Federal. Alicia, recalca que las discrepancias entre los datos de la lista publicada en 2018 y la publicada en 2023 son el enfoque de la plataforma Volver a desaparecer.

  • 2017: la Ley General en Materia de Desaparición Forzada, Desaparición Cometida por Particulares y del Sistema Nacional de Búsqueda de Personas (LGMD) ordena la creación de un Registro Nacional de Personas Desaparecidas, el cual nunca se hizo público, más allá de un buscador por nombre.
  • 2019: el primer comisionado de la Comisión Nacional de Búsqueda (CNB) publica una base de datos sin nombres, para después renunciar.
  • 2020: la  Comisión Nacional de Búsqueda publica la Versión Pública RNPDNO. No es una base de datos descargable, no se pueden buscar nombres.
  • Agosto del 2023: se publica un listado de 110 mil 964 nombres y datos básicos de personas desaparecidas, junto con la renuncia de Karla Quintana, la comisionada de la CNB en ese momento.
  • 14 de diciembre del 2023: se publica el “censo” (aunque la palabra es mal utilizada, ya que las autoridades no fueron de puerta en puerta a preguntar si alguien tenía un familiar desaparecido) bajo el nombre Estrategia Nacional de Búsqueda Generalizada. Tiene 96 mil 738 nombres sin ningún tipo de explicación sobre la reducción del número del 2018.

Importancia de los registros

“Al gobierno le gusta mucho llamar registros a publicaciones que coleccionan información, pero que no son registros”, adelantó Alicia. 

Franco menciona lo indispensable que es que los registros sean rigurosos, completos y tomados en serio, algo que no suelen hacer las autoridades obligadas al elaborarlos. Al respecto, enumera las razones por las cuales estos son tan relevantes para dimensionar la problemática de las desapariciones, así como para abonar a la construcción de memoria, verdad y transparencia para la ciudadanía y las familias:

  1. Ayudan a entender qué se está contando cuando se cuenta a las personas desaparecidas y qué no cuenta.
  2. Son potenciales fuentes de información. Hay que utilizar un registro para generar herramientas para mejorar las tomas de decisiones del Estado y los colectivos interesados.
  3. Sin buenos registros, no se toman buenas decisiones. Pueden mostrar tendencias para hacer un mejor análisis, mostrar cómo se desarrolla el fenómeno a través del tiempo.
  4. La ciudadanía tiene derecho a rendir cuentas al Estado y gobierno sobre su actuar. Sin registros correctos, no se sabe qué se hace, cómo se hace, qué necesita mejorar.

Hallazgos principales de la plataforma Volver a desaparecer 

“Yo considero que las inconsistencias y la falta de información son suficientes omisiones graves del Estado. Es su responsabilidad atender esta violación grave a derechos humanos y prevenirla. El actuar del Estado con respecto a los registros ha hecho lo contrario, no ha ayudado a los familiares”, precisa Alicia Franco. 

En ese sentido, la analista explica que el llamado “censo” de personas desaparecidas de diciembre de 2023 “no especifica la metodología utilizada”. Y, si bien, han pasado casi cuatro meses desde su publicación, el Gobierno Federal continúa sin hacer esta información pública, de tal forma que, resulta “incomprensible”. Por otro lado, no se utilizaron los nombres y categorías que normalmente son referidos en los registros, por lo tanto, tampoco  “se entiende qué es qué, ni cómo se consiguió la información” señaló la analista.

Aunado a ello, advirtió Alicia “la manera en la que se presenta la información no es accesible”. Anteriormente presentaron archivos en formato JSON, un formato de texto sencillo utilizado por programadores, que no era comprensible para aquellas personas sin ese conocimiento previo. De tal forma que, la información en lugar de aclarar dudas, genera confusión y tampoco ofrece explicaciones suficientes para comprender situaciones tan relevantes como “por qué hay personas que no aparecen en futuras listas, si es que fueron localizadas o simplemente omitidas”.