Jaime GUERRERO
Oaxaca, Oax. (pagina3.mx).- El delegado en la entidad de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Jorge Villar Lloréns, adelantó que Oaxaca no estará exento de un mandato constitucional y no es un capricho mejorar la calidad de la educación en el Estado “y no se puede tapar el Sol con un dedo”.
Anunció entonces que los procesos de evaluación a los maestros y alumnos de Oaxaca se realizaran, como en todo el país como parte de la Reforma Educativa.
«Necesitamos concurrir a la evaluaciones de los estudiantes y de los profesores para mejorar. Vienen en el estado de Oaxaca procesos de evaluación que se hacen en todo el país. Que nos digan en qué nivel nos encontramos para poder ver qué debilidades tenemos, qué fortalezas tenemos y tratar de mejorar la educación. Ese el proceso que vienen para el Estado», declaró sin precisar tiempos de aplicación y mecanismos.
Respecto de las declaraciones del Secretario de Educación Pública, Emilio Chuayfet Chemor, quien la vísepera dijo que en Oaxaca se hace la voluntad de la sección 22 de la CNTE, el titular de la SEP en Oaxaca, dijo que si bien «hay una realidad, no se puede tapar el sol con un dedo».
«No es un capricho mejorar la calidad de la educación, esa es una desición que toma el gobierno de la república porque hace un diagnóstico en el que se indica que para salir como país, para mejorar como país se requiere que la educación sea de calidad», asentó.
El funcionario federal, evitó emitir un posicionamiento sobre la falta de armonización de la reforma educativa que hasta el momento continúa pendiente por parte de las y los diputados de la Sexagésima Segunda Legislatura Local.
Villar Lloréns indicó que habrán que ser los propios legisladores quienes expliquen porqué la dilación hasta el momento, aunque, consideró que lo anterior no es indispensable para la aplicación de las nuevas disposiciones en materia educativa toda vez que «hay un cambio constitucional innegable. La ley y la constitución es para todo el país», declaró.
Y es que admitió que al mismo tiempo es un reto para la federación debido a la resistencia que ha generado la sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) a la Reforma Educativa concretada el año pasado.
Sin embargo, confió en que de parte del profesorado «habrá una reflexión oportuna para buscar el beneficio de los estudiantes» pero sobre todo, añadió, la evaluación será basada en la voluntad de los padres y madres de familia quienes desean mejorar la calidad de la educación de sus hijas e hijos. «Tenemos que hacerle caso a la sociedad, tenemos que hacerle caso a los padres de familia», estableció.
Al final, manifestó que la reforma educativa y la transformación educativa la hacen los maestros y «lo que no hay que confundir los problemas sindicales con la calidad de la educación», declaró.