Jaime GUERRERO
OAXACA (#pagina3.mx).- Al grito de “Ulises, asesino, la cuenta está pendiente”, integrantes de la Sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) rodearon el hotel Los Lauleres, en San Felipe del Agua, donde el ex gobernador de Oaxaca, Ulises Ruiz Ortiz, sostuvo un encuentro con medios de comunicación.
Al lugar arribaron menos de 20 trabajadores de la educación, encabezados por el secretario de Organización Política, Genaro Martínez Villalobos, para repudiar la presencia del ex mandatario y recordar que tiene una cuenta pendiente con el pueblo de Oaxaca desde 2006.
Al lugar también llegó un grupo de jóvenes, mujeres y niños, algunos encapuchados, quienes reforzaron la protesta y se unieron a las consignas contra el mandatario.
Este grupo de personas se montaron en la protesta de los profesores e ingresaron a al edificio ubicado en San Felipe del Agua para tratar de sacar al ex mandatario.
Comensales y funcionarios de la actual administración abandonaron el lugar, entre ellos, Javier Villacaña y José Ángel Díaz, ex titular de administración y contralor, respectivamente. Ambos actores estaban en otra reunión distinta, en el mismo hotel.
Los integrantes del magisterio lanzaron arengas y le recordaron a Ruiz Ortiz, que tiene una cuenta pendiente con el moviendo socio político.
Tras unos minutos de posicionamiento, un grupo de jóvenes, irrumpió en el lugar y amagaron con quemar el lugar.
Por las protestas, salió el propietario del hotel, para pedir a los manifestantes abandonar el lugar. En tanto, los integrantes del magisterio se mantuvieron al margen y afuera de las instalaciones.
En tanto, Ruiz Ortiz, aseguró que la protesta en su contra, tenía olor y sabor a PRI. “A ellos les pagan y lo hacen con todo mundo”, afirmó el polémico ex mandatario.
Y es que aseguró que en su sexenio, enfrente a los dirigentes del magisterio en el 2006, no estuvo dispuesto a ceder a sus demandas, los dirigentes ya habían recibido 400 millones de pesos.
“No cometí excesos simplemente aplique la ley y di cumplimiento a la orden emitida por un juez”, porque la perversión de los líderes de la Sección 22 del SNTE, “no tiene magia”, solo hay que revisar el pasado y como falsificaron a sus muertos, a quienes ellos mismos asesinaron, dijo en su defensa.