Pedro Matías/Diana Manzo
*Trasciende que fueron secuestros y piden una millonaria cantidad para liberarlos
OAXACA, Oax. (pagina3.mx).- La Fiscalía General de Oaxaca confirmó la “no localización” de la presidenta municipal de San José Independencia, Agar Cansino Gómez, y el tesorero municipal Alberto Antonio García, quienes fueron vistos por última vez durante la mañana de este miércoles 17 de abril de 2024.
Trascendió que tanto la presidenta municipal y su esposo, quien funge como tesorero del mismo municipio San José Independencia, fueron secuestrados y que piden un rescate millonario, sin embargo, la fiscalía solo refiere en un comunicado que están en calidad de “no localizados”.
Es por ello que la Fiscalía de Oaxaca implementó los protocolos de búsqueda e investigación especializada ante denuncia de No Localización de la presidenta municipal de San José Independencia y su esposo, quien a su vez es el tesorero municipal de esa misma localidad.
Precisó que luego de recibir la denuncia por la No Localización de la presidenta municipal de San José Independencia, identificada como A. C. G., así como de su esposo, A. A. G., hechos ocurridos en la región de la Cuenca del Papaloapan, se iniciaron las investigaciones correspondientes.
De acuerdo con la denuncia y la obtención de los datos derivados de los resultados de las investigaciones iniciales, se estableció que la presidenta municipal y su esposo salieron de su domicilio ubicado en Loma Bonita, a bordo de un automóvil para enfilarse rumbo a San Juan Bautista Tuxtepec.
De manera preliminar, se realizaron actos de investigación e inteligencia criminal para conocer las rutas y sitios en que se sabe que estuvieron A. C. G. y A. A. G., labores gracias a las cuales se lograron establecer sólidas líneas de investigación que conduzcan a la localización de las víctimas.
La Fiscalía de Oaxaca aplica los protocolos de investigación ante casos de personas No Localizadas en este tipo de casos, además que realiza investigación multidisciplinarias para integrar diferentes áreas hasta agotar los recursos ministeriales para dar con el paradero de las víctimas.
